Por el Pardo Péramo
(más conocido como el Rafa Urretabizkaya)

Medio de esponja así, como de coso.
El Negro les manda la mano por las chichas y los va apretando. Entonces les hace de acá con este dedo o con este y a los muñecos les salta una charla.
Ojo. Les manda por las chichas pero que no tienen. Porque son muñecos vacíos. Te digo porque yo los ví. Porque lo que es es y lo que no no. Tampoco la huevada.
A esos muñecos los cría de chiquitos.
Capáz le da polenta, asado. De lo que hay hay, dice el Negro; y de lo que no, no.
Los sabe andar trayendo en una valijita, mesturado con unas cajas de vino y una empanada que en el cumpleaños de Adriano apartaron por reventada y estaba sana.
A veces los muñecos se copetean y el Negro se calienta.
Pero, ¿y qué?, le digo. Si vos los enseñas y después ¿qué?. La culpa no es del coso ¡dijo el otro!
Así como te digo se acalora el debate y asi es la función de la Compañía de Títeres La Pelela.
Si la van a ver tienen compañía.
Yo ya se.
El Pardo Urretabizkaya